Día 72: Squella cree que rechazo de 2/3 mataría la Convención y los "octubristas" le responden
Marcos Barraza dijo que el convencional y abogado constitucionalista quiere una democracia tutelada. Asimismo, un estudio demuestra la guerrilla online contra la Convención desde la ultraderecha.
El famoso quórum de 2/3 sigue revolviendo las aguas dentro de la Convención Constituyente. Y esto no porque se discute ahora cuáles son esas disposiciones reglamentarias que serán votadas bajo este quórum supramayoritario, sino porque un defensor de los 2/3, Agustín Squella, dijo en una entrevista que si el pleno echa abajo esta disposición, consagrada en reforma constitucional que dio pie al proceso constituyente, simplemente “se acaba la convención”.
Squella no lo dijo porque sí; lo dijo porque sabe que las reglas del juego ya estaban escritas y todos decidieron participar en esta Convención bajo esas reglas. “¿Cómo una Convención que va a establecer reglas constitucionales a futuro para el país va a partir incumpliendo ella una norma constitucional que la rige?”, declaró en radio Cooperativa.
Squella expresó su sorpresa por ver cómo un grupo, al que señaló como “minoría”, sigue obsesionado con los 2/3. “No sé cómo diablos estamos todavía discutiendo los dos tercios”, señaló, para luego afirmar que “de una vez por todas los convencionales deberíamos admitir un hecho objetivo, que por lo demás conocíamos cuando competimos para ser constituyentes y cuando se instaló la Convención, hay un quórum de dos tercios para aprobar futuras normas constitucionales y para aprobar normas de votación”.
En la Convención Constitucional respondieron aquellos que se encuentran en posiciones más ultras, aquellos que hoy están enzarzados en una pelea casi personal con el poder constituido con el sólo objetivo de enviar señales a sus adherentes.
El PC Marcos Barraza fue el que respondió más duro a Squella: “Yo creo que él básicamente es un ejemplo de quien vive con nostalgia la democracia de los acuerdos, no se siente cómodo cuando hay soberanía popular, mas bien quiere una democracia restrictiva, quiere tutelaje, y por lo mismo no escatima en argumentos catastrofistas para efectos de la convención constitucional”. Y luego agregó:
“Yo creo que la convención está lejos de sucumbir o acabarse producto de una deliberación que es soberana dentro de la Convención Constituyente. Yo lo invitaría a él a que creyera más en la democracia”.
Esa oscura obsesión…
Hay otras voces “octubristas” (así se les dice dentro de la Convención a los que se empecinan en la lógica del estallido), esas que se levantan contra el quórum de 2/3, que todavía no logran explicar qué harán una vez que la Corte Suprema, única instancia de control sobre la Convención, los llegue a poner en vereda en caso que efectivamente el órgano rechace el quórum.
¿Qué les hace creer que la mayoría defiende su tesis? ¿Esperarán acaso a que millones de chilenos y chilenas salgan a la calle a defender su postura, esperando así que la fuerza de un nuevo estallido impulse esa voluntad popular? ¿Qué les lleva a descartar el hecho de que una mayoría pueda estar de acuerdo con el quórum de 2/3?
¿Acaso renunciarán si no consiguen su objetivo o si la Corte Suprema decreta como inconstitucional un quórum alternativo? ¿Están dispuestos a herir de muerte a la Convención con tal de darse el gustito testimonial? ¿Qué proyección tendría una Constitución que puede ser modificada con mayorías circunstanciales?
La mayoría, sin embargo, y a juzgar por los sondeos que realizan los mismos convencionales, quienes estarían por ratificar los 2/3 constituyen una mayoría que se impondría por dos tercios. Es decir, son mayoría total.
“Los 2/3 se van a mantener, independiente de las señales que algunos quieran dar”, señaló el convencional del colectivo socialista, César Valenzuela.
La guerrilla online contra la Convención
Nuevamente llegan a nosotros evidencias de ataques de la ultraderecha a la Convención Constitucional. Esta vez desde Fundación Interpreta, cuyo estudio fue publicado por Ciper Chile. ¿Qué encontró ese estudio? Pues que los participantes de los ataques coordinados a través de redes sociales son hombres, de ultraderecha, votaron Rechazo, se declaran defensores de la familia y se dicen “patriotas”, todos ellos conformando un grupo que es minoritario. En su inmensa mayoría son, por cierto, seguidores de ese vago redomado que lleva el nombre de José Antonio Kast.
Cuando estalló el escándalo de Rodrigo Rojas Vade, los ataques a la convención en Twitter se incrementaron en un 1.500%. Luego que se destapara el caso, se registraron 35.024 menciones con el hashtag #alabasuralacc.
Dijo Tomás Lawrence, director Ejecutivo de Fundación Interpreta:
“Queda en evidencia la necesidad de incidir en el debate público que tiene este sector minoritario de la población, y que se encuentra estrechamente relacionado con el Rechazo en el plebiscito de entrada. Son los mismos que insisten en generar percepciones negativas en torno al proceso constituyente, intentando desvirtuar y entorpecer el trabajo real que se ha generado”.
Tal estrategia de copamiento, agregó, “lo único que busca es desacreditar y quitarle legitimidad al proceso, sin siquiera generar una instancia de diálogo o procesos de análisis constructivos sobre el tema”.
Los enfermos de cáncer le dieron el filo a Rojas Vade
Una serie de agrupaciones de enfermos de cáncer dieron a conocer un durísimo comunicado contra Rodrigo Rojas Vade, quien construyó su candidatura sobre la mentira de estar enfermo de cáncer. “En Chile cada año se diagnostican unos 58 mil casos de cáncer y mueren cerca de 28 mil personas debido a la enfermedad”, decía el comunicado escrito por representantes de la Asociación Chilena de Agrupaciones Oncológicas (Achago), Fundación Foro Nacional del Cáncer y la Red de Pacientes Oncológicos (Oncoloop), entre otras, cuyos representantes han “realizado rifas y completadas” para pagar sus gastos médicos o para “ayudar a que otros lo hagan”.
“El montaje llevado adelante por Rodrigo Rojas Vade nos violenta profundamente“, toda vez que “disfrazarse de enfermo de cáncer para obtener ganancias económicas y generar adhesión ciudadana con una causa que le es ajena y le valió ser electo en la Convención Constituyente, nos parece un insulto y una estafa“.
“Quienes hemos padecido cáncer o somos familiares de un paciente sabemos el enorme costo económico y emocional que esto acarrea, recibir el diagnóstico es un golpe que remueve los cimientos de la vida, reordena las prioridades y compromete con la causa para siempre”, agregaba el escrito.
“Nos parecen lamentables los argumentos y justificaciones que han esgrimido en favor de Rojas Vade”, ya que, “este engaño descarado no es una simple mentira, es algo que planificó meticulosamente alguien que carece de escrúpulos y cuyas ‘disculpas’ no aceptamos”, agregaron los firmantes.
Asimismo criticaron la actitud del todavía convencional, quien aún no renuncia a ser parte de la Convención, generando así “un daño al proceso que se está desarrollando, que apoyamos y en el cual creemos”.
“Rojas Vade es una persona que atentó contra la fe pública y, en virtud de aquello, creemos que debe ser excluido de la Convención Constituyente”, concluyó.
Ya. Sería todo por hoy. ¡Hasta mañana!