Día 10: Se avanza en el reglamento mientras la derecha sólo tiene un plan: desacreditar
La derecha no tiene los votos y no le queda más que denunciar la "flojera" y el "desorden" de la Convención, esperando así que la gente se aburra y rechace la nueva Carta Magna.
Seamos sinceros: la vida tiene algo de show. ¿La política? También. Y hay personas con talento para el espectáculo como Tere Marinovic, que lo está pasando como chancho en el barro con su puesta en escena, consciente de que su sector poco y nada puede hacer para impedir los cambios que terminarán con los privilegios de sus electores.
Su plan es desprestigiar el trabajo de los convencionales, para que ciudadanos y ciudadanas se aburran de la Convención y opten por mantener la Constitución de Pinochet y Lagos.
Partió a primera hora emitiendo un video que fue rápidamente viralizado en redes por sus fans (¿o bots?), en el que acusan a los convencionales de “sacar la vuelta”.
Pero fue Beatriz Sánchez, de Apruebo Dignidad, quien salió a aclarar esta situación, poniendo énfasis en lo malintencionado de esta publicación en redes. “Hay un interés por decir que los convencionales flojean, un poco haciendo el símil con lo que se ve en el Congreso, que está desprestigiado. Pero es bueno contarle a las personas que el trabajo empieza muy temprano en la mañana y continúa hasta bien avanzada la tarde”, señaló.
Pero “La Tere” (así le dicen todos: “La Tere”) no se quedó ahí y al rato las emprendió contra la presidenta de la Convención, Elisa Loncón, a quien criticó sus opiniones políticas y su ánimo refundacional.
Y es que, a juicio de La Tere, como que nada que ver que alguien hable de política en una instancia política donde se habla de escribir la nueva Constitución Política. ¿Qué tiene que ver la política? O sea, del chanchito en el barro pasamos entonces al chancho en misa.
Elisa Loncón le respondió. Así que mejor dejemos que la presidenta de la Convención hable por sí misma:
“Cuando yo hablo respecto a los derechos de la nación mapuche, hablo por mi condición de mapuche, yo no llegué acá de otra manera sino desde mi postura miembro de este pueblo originario y tengo derecho también a dar a conocer mi postura en tanto constituyente indígena, eso que quede muy claro”.
"Vamos a tener posturas distintas, pero estamos acá para deliberar, para en esa diferencia encontrar la solución de los problemas que hoy día afectan a Chile, entonces no podemos callar a una constituyente porque tiene un rol. Tengo derecho a hablar como mapuche, y desde donde yo esté, lo voy a hacer".
También la convencional Francisca Linconao, le leyó la cartilla a “La Tere” en orden a que no estamos para patrones (o patronas) de fundo.
“Como escaño reservado pedimos respeto, que sean respetados los mapuches, que sea respetada la presidenta, así como nosotros respetamos a los huinca”.
Soy machi, autoridad tradicional de mi pueblo mapuche, represento a mi pueblo mapuche, lo que yo quiero se los voy a decir al tiro: yo estoy como escaño reservado, necesitamos que las tierras se devuelvan, necesitamos las aguas, lo que quitaron a nuestro pueblo, a nuestros abuelos y abuelas“.
“Que se respete el cerro, las aguas y todos los territorios y también se respete a las machi, a los lonko y a todos como nación mapuche”.
“Que se respete para que podamos escribir la nueva Constitución, porque esta constitución tiene que cambiar, porque para eso estamos”.
El desenlace de la telenovela de conventillo
¿Y qué dijo la otra? Recuperando los usos del viejo conventillo capitalino, La Tere fue a increpar a Loncón apenas terminó la sesión. Como ese clásico vecino que se mete en la vida de todos y se pelea con todos porque no tiene otra cosa útil que hacer, La Tere partió taconeando a lo campeona en dirección a la mesa, pero el vicepresidente Jaime Bassa la atajó y evitó que el bochorno siguiera creciendo.
Y para que no digan que somos “cahuineros” y “carboneros” (no hay peor cosa que un cahuinero-carbonero, un insidioso elevado al cuadrado), les dejamos el video (corre video):
Aunque al final el problema no es La Tere, porque se sabe, como decimos por estos lados, que la culpa no es del chancho, sino del que le da afrecho. Para que entiendan los amigos y amigas del extranjero: dar el afrecho es “meterle ficha”, “patearle la jaula” o “hacerle doble click”. En el fondo, prestarle atención indebida, alentando su espectáculo.
Reglamento, presupuesto, ética y probidad
Vamos a lo importante: ya se está empezando a hablar del reglamento, presupuesto, ética, probidad… De eso se trató la primera sesión plena de la semana.
La Convención ya va en camino de conformar sus comités para regular diferentes aspectos relativos a su funcionamiento. Vamos aprendiendo en el camino, haciéndonos camino al andar, porque nunca antes habíamos tenido una Convención así.
¿Cómo organizamos la discusión?
¿Cómo conformamos los comités y quiénes han de integrarlos?
¿Cómo organizamos el régimen de trabajo?
¿Cómo reglamentamos el lobby, las reuniones?
¿Cómo promovemos la transparencia activa y la participación ciudadana?
Los convencionales tomaron la palabra expresando sus deseos y propuestas:
Lenguaje sin sexismos ni racismo
Discursos sencillos y breves
Apertura
Tolerancia en la diversidad
Protocolos claros para prevenir el covid-19
Trabajo en regiones
Regulación del régimen de trabajo y consideración por las tareas de cuidado que realizan muchas convencionales
Una debida planificación en atención de las necesidades de quienes viven en regiones
El independiente no neutral Agustín Squella dijo, como si no quiere la cosa, que estuvo medio arrepentido de votar “Apruebo” pero que ya había recuperado la fe esta semana.
Los arriendos en Santiago (temazo), también tienen realmente preocupados a muchos convencionales que han conocido el exorbitante costo de la vida en la capital.
Alexis Caiguán, representante mapuche, apuntó a la necesidad de estudiar reembolsos de alojamientos y traslados, cosa que respaldaron otros convencionales que viven lejos.
Por ahí surgió la idea de pedir más recursos, pero los convencionales de derecha salieron a decir que esto ya se parecía al Congreso y bla, bla, bla… Partiendo (obvio) por La Tere y el UDI Arturo Zúñiga, que demostró ser un verdadero genio en el cuidado del erario público. (Bueno, es cosa de ver su brillante gestión en la Subsecretaría de Redes Asistenciales con el tema de las residencias sanitarias que detonaron lapidario informe de la Contraloría.)
No. No pondremos el video de Zúñiga, quien se quejó de que el protocolo Covid-19 es un privilegio (o sea, como el Congreso).
Mucho por hoy. A nosotros no nos gustan los cahuines (mentira: los amamos).
Corre video y chao, hasta mañana.